Para que vea mi hermana Cristina que me acuerdo de ella, voy a contar aquella vez que quedamos con mi tío Pepe y mi primo Jorge en el antiguo Galerías Preciados. Por aquella época (92-93) mi tío vivía en la Plaza Mariana Pineda y ese fin de semana lo pasaba mi primo Jorge con él, mi hermana Cristina y yo nos acercamos por la tarde para verlos y, al anochecer nos fuimos a la cafetería de Galerías Preciados (ahora El Corte Inglés) para tomar algo.
Mi hermana Cristina empezó a hacer el pardo y subió las escaleras por las escaleras mecánicas que bajaban, inevitablemente pasó lo que tenía que pasar, metió un jaramazo y dio con una rodilla en uno de los escalones, mientras bajaba en pompa hacia el suelo. Al otro lado de la escalera, en la que subía, íbamos mi tío, mi primo Jorge y yo mismo, viendo la extraña situación (no tan extraña porque he vuelto a ver bastantes veces a niños/as haciendo el pardo en escaleras).
La rodilla de mi hermana quedó con la marca del escalón de la escalera mecánica, y le sangró un poco, bueno, lo suficiente como para que mi tío la tuviera que llevar a Urgencias después de avisar a mis padres y le echaran unos puntos.
Yo me quedé con mi primo Jorge en casa de mi tío echándonos unas partidas a la consola que tenía, una emuladora con 1000 juegos de la nintendo super chungos (Contra 1, Contra 2, Contra 3, y así hasta el infinito).
ESTA PUDO SER LA ESCALERA ASESINA
PD, también me acuerdo, en esta entrada, de mi primo y mi tío.
viernes, 21 de enero de 2011
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1 comentario:
jeje, yo también me acuerdo, todavía tengo la cicatriz, MORALEJA: no hay q hacer el pardo x las escaleras mecánicas, gracias x acosrdarte xq aunq no lo creas guardo muy buen recuerdo de ese día, bsss!!!
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