Hace un par de semanas estuve con Mª Rosa en una piscina y vi a unos niños de unos 11 o 12 años haciendo el canuto mientras saltaban al agua.
Me explico, se ponían los 3 niños en el bordillo de la piscina, hacían una especie de baile y luego saltaban.
Entonces me vino un flash de mi infancia cuando veraneaba en Lanjarón (fueron muchos años). La piscina del Hotel Andalucía tiene forma de pez, y en la boca tiene una burbuja que es la piscina para niños chicos. Durante la semana que pasábamos allí mi hermano Fali y yo nos hacíamos algún amigo entre los niños del pueblo que iban a la piscina o de algún niño que se alojaba en el hotel.
Un año, nos hicímos amigos de un niño y estaba en pleno boom los ordenadores, sí los Spectrum, Amstrand, MSX, y también estaba por allí la Nintendo 64K.
Eramos unos flipaos de los juegos y se nos ocurrió que, mientras uno hacía de jugador que tenía que llegar al final de la piscina chica, los otros eran los malos que tenían que impedírselo.
Era como jugar al Monstruo de la última pantalla, si tocabas el grifo por donde le entraba agua a la piscina, ganabas, eras el mejor.
Nos tirábamos horas y horas jugando a eso, y a saltar haciendo bailes, de espaldas, a ver quien aguantaba más sin respirar debajo del agua.
Viendo a las nuevas generaciones, en el fondo, muy fondo, no me parecen en algunos aspectos tan diferentes a nosotros (bueno a mí).
lunes, 20 de julio de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario